13 consejos de motivación para la limpieza (para cuando realmente no quieres hacerlo)

13 consejos de motivación para la limpieza (cuando realmente no te apetece hacerlo)

Afrontémoslo: la limpieza puede ser difícil. Es difícil establecer una rutina de limpieza. A veces, comienzo pero pierdo la motivación para limpiar y me enfoco en otros proyectos (¡más divertidos!). Con nuestras vidas ocupadas, la limpieza puede caer al final de nuestra lista. ¿Quién quiere limpiar cuando puede estar divirtiéndose afuera?

Incluso ahora que mis hijos me ayudan, todavía es difícil mantener el impulso. Desafortunadamente, mi casa necesita ser limpiada regularmente (¡todavía no he conocido al hada de la limpieza!).

¿Por qué no puedo motivarme para limpiar?

Todos queremos un hogar limpio, pero es difícil obtener (y mantener) la motivación para hacer la limpieza del hogar. ¿Por qué es eso? Aquí hay algunas razones comunes:

  • Estoy cansado: ¡esto es importante! Al final del día (o de la semana), puede ser lo último que quieres hacer.
  • Es abrumador: es posible que no sepas por dónde empezar y puede parecer que limpiar llevará mucho tiempo.
  • No quiero limpiar después de todos: cuando eres responsable de hacer la mayor parte de la limpieza, puedes cansarte.
  • Acabo de limpiar: a menudo, sentimos que tan pronto como limpiamos, vuelve a ensuciarse, ¿por qué molestarse? Entre los niños y las mascotas, parece ensuciarse rápidamente de nuevo.
  • Estoy demasiado ocupado: no tienes mucho tiempo extra y puede parecer imposible agregar otra tarea a tu lista de tareas.
  • No me gusta limpiar (o no soy bueno en eso): la limpieza no siempre es divertida o puedes sentir que nunca haces un buen trabajo.

Puede que no nos sintamos motivados para limpiar, pero desafortunadamente es algo que necesitamos hacer. Para ayudarte, aquí tienes trece consejos motivacionales que me inspiran a limpiar. Prueba algunos (¡o todos!) la próxima vez que necesites motivación para limpiar.

Cómo motivarse para limpiar (incluso cuando realmente no quieres)

Ya nos guste o no, tenemos que limpiar nuestra casa. Aquí tienes trece de mis formas favoritas de emocionarme por la limpieza ¡y funcionan!

1. Cambia tu mentalidad

Como madres, a menudo somos responsables de limpiar nuestros hogares. Especialmente cuando tienes pequeños que no pueden ayudar (pero hacen mucho desorden) o tu familia no valora la limpieza. Puede parecer que eres la única que se preocupa.

Es fácil sentir resentimiento por la cantidad de trabajo que haces en comparación con los miembros de tu familia (solo una suposición).

Pero ese tipo de pensamiento no es útil (para ti ni para nadie más). En su lugar, cambia tu forma de pensar sobre la limpieza. Recuérdarte a ti misma que hace que tu hogar sea más agradable. Cambiar tu mentalidad para centrarte en por qué un hogar limpio es importante te ayuda a sentir menos resentimiento y más motivación.

2. Comienza por algo pequeño

Si te sientes abrumado, comienza por algo pequeño. Empieza por centrarte en una categoría. Mira alrededor y elige algo que puedas abordar fácilmente. Tal vez recoger los libros, o lavar los platos sucios. Una vez que hayas terminado, pasa a otra categoría ¡y sigue adelante!

Otra táctica es elegir un espacio pequeño, como la encimera de la cocina, y limpiar eso primero. Cuando hayas terminado, pasa a otro lugar. Comenzar por algo pequeño y elegir una tarea te ayuda a enfocarte en algo manejable. Te brinda una victoria rápida para aumentar tu motivación.

3. Encuentra un momento que funcione para ti

Cuando la limpieza está en tu lista de tareas, abórdala cuando tengas más energía. Si te sientes mejor al principio del día, limpia temprano, así tendrás el resto del día para hacer otras cosas (¡y disfrutar de tu hogar limpio!)

Para la mayoría de las personas, la mañana es el mejor momento para realizar tareas difíciles. Pero tal vez tienes más energía a mitad del día, o incluso te guste limpiar en el silencio después de que los niños se acuesten. Elige un momento que funcione mejor para ti.

4. Crea una rutina y un horario de limpieza

Otro consejo genial es crear un horario de limpieza. Tal vez puedas pasar todo un día limpiando toda tu casa, pero eso no funciona para todos.

Una solución fácil es trabajar en bloques de tiempo. Reserva un breve período de tiempo (por ejemplo, 25 minutos) seguido de una pausa (de 5 a 10 minutos). Usar un temporizador te ayuda a mantenerte en horario. Este método funciona bien para cualquiera que se sienta abrumado.

Completa tantos bloques como puedas en un solo momento: ¡uno, dos, tres o más! Descubrirás que una vez que comienzas, estás más motivado para seguir adelante. Además, te sorprenderá cuánto puedes lograr en una o dos horas.

Otra opción es distribuir tus bloques a lo largo de la semana y enfocarte en tareas específicas en ciertos días de la semana. ¡Al final de la semana, habrás limpiado toda tu casa!

Imprime una lista de tareas de limpieza para no olvidar nada. Esta lista está dividida por habitaciones de tu hogar (sala de estar, baño, comedor, etc.).

Otra cosa que me gusta hacer es programar momentos específicos para la limpieza profunda. Mis momentos favoritos son cuando cambian las estaciones, especialmente en primavera y otoño.

6. Hazlo un evento familiar

Una regla en nuestra casa es que la limpieza es responsabilidad de la familia. Por supuesto, parece más fácil si lo hago por ellos, ¡pero luego mis hijos no aprenderán a cuidar de sus cosas! Además, no adquirirán las habilidades que necesitarán como adultos. La mayor parte del tiempo, no hago nada por mis hijos que ellos puedan hacer por sí mismos, como recoger sus habitaciones y lavar su ropa.

Y no olvides que si todos ayudan, terminarán más rápido y estarán listos para pasar un tiempo de calidad juntos. ¡Es una situación en la que todos ganan! Cuando la limpieza es un asunto familiar, te sorprenderá que sea divertida, especialmente si pones música alegre y bailas.

Dado que los niños tienen diferentes habilidades a diferentes edades, asigna tareas adecuadas a su edad. No quieres frustrarlos (¡ni frustrarte tú!) dándoles un proyecto demasiado avanzado. ¡Pero incluso a partir de los dos años, los niños pueden ayudar! He creado una lista de tareas apropiadas para cada edad para darte algunas ideas.

Otra forma de motivar a tus hijos (especialmente a los más pequeños) es usar un gráfico de tareas imprimible. Esto puede incluir imágenes o palabras (si saben leer). Pueden ir marcando los elementos a medida que los completen o utilizar stickers como sistema de recompensas.

Ahora que mis hijos son mayores, creamos un plan familiar para limpiar juntos. Están más comprometidos y dispuestos a ayudar porque tienen voz y voto en qué tareas quieren realizar.

6. Transforma las tareas de limpieza en un juego

Otra forma divertida de limpiar con tus hijos es convertirlo en un juego. A los niños les encanta jugar, así que tal vez logres hacer más sin tantas quejas.

Si usas un temporizador para tus bloques de limpieza, considera un pequeño desafío para aumentar el factor de diversión. Configura tu temporizador (10 minutos está bien) y ve qué puedes lograr. Luego intenta superar tu tiempo mañana. Cuando los niños eran pequeños, me encantaba usar este temporizador visual.

7. Organiza tus productos de limpieza

Cuando necesitas limpiar, no hay nada peor que tener que ir de un lado a otro de la casa buscando los suministros. Creamos una estación de limpieza donde guardamos nuestros productos de limpieza naturales.

Soy una gran fan de los productos de limpieza naturales (como ya sabes), y durante años he optado por la opción de “hazlo tú mismo”. Ahora que mis hijos son mayores y estamos más ocupados, no tengo tanto tiempo para hacer mis propios productos de limpieza. En cambio, he encontrado uno nuevo favorito que uso para casi todo.

Los productos de limpieza Branch Basics son a base de plantas (es decir, seguros) y eficaces, pero también versátiles, y puedo usar un limpiador para la mayor parte de la casa. Usar un solo producto para tantas tareas diferentes hace que la limpieza sea más fácil. No tenemos que sacar múltiples ingredientes para hacer limpiadores cuando se nos acaban. Además, es un gran truco de limpieza porque ¡solo necesitas un producto!

8. Escucha música o podcasts

¿Odias limpiar porque preferirías estar haciendo cualquier otra cosa? ¿Por qué no hacer que sea divertido para ayudarte a motivarte?

Crea una lista de reproducción divertida con música animada y baila por la casa. O, escucha tu podcast favorito, ¡y seguramente aprenderás algo nuevo! En familia, a veces escuchamos una charla motivadora de TED o un audiolibro juntos mientras limpiamos.

10. Mantén el objetivo en mente

Es fácil desanimarse cuando tienes que limpiar pero no quieres hacerlo. Una forma de mantener la motivación es mantener el objetivo en mente. Piensa en lo agradable que es pasar tiempo en un espacio limpio y en cómo te sentirás menos estresado cuando tengas un hogar ordenado. Vale la pena el tiempo (y apuesto a que tomará menos tiempo del que piensas).

11. Deshazte del desorden para tener menos que limpiar

Con los niños, es fácil sentirse abrumado con los dibujos, juguetes, juegos y ropa sucia. Soy una gran fan de llevar una vida minimalista, por lo que hemos trabajado mucho durante los años para mantener nuestra casa libre de desorden. Menos cosas significan una casa menos desordenada y hacen que el trabajo sea más fácil (y más rápido).

Los estudios también demuestran que la cantidad de cosas en una casa está directamente relacionada con nuestros niveles de estrés. Un artículo de 2010 reveló que las madres con casas desordenadas tenían niveles más altos de cortisol (nuestra hormona del estrés) durante el día. Sin embargo, la mayoría de los padres en el estudio no percibían sus hogares como desordenados, a pesar de vivir en el mismo espacio. Y cuanto más desorden tiene alguien, más probable es que posponga las tareas.

Si te cuesta motivarte porque estás abrumado por el desorden, considera deshacerte del desorden y abrazar el minimalismo. Sé que puede sonar imposible de hacer con niños, pero he encontrado que es muy exitoso con mi familia. También he hablado sobre el desorden en mi podcast antes, ¡si quieres aprender más mientras limpias!

12. Recompénsate

¿A quién no le encanta una recompensa por un trabajo bien hecho? Darse un pequeño capricho es un gran incentivo para limpiar. Y no tiene por qué ser costoso. Después de limpiar, date el gusto de tomar una taza de té agradable, un tiempo para leer o incluso un buen baño (¡en tu bañera recién limpia!). Tener algo a lo que esperas como recompensa te ayudará a mantener la motivación.

13. Deja de lado el perfeccionismo

Lo más importante es recordar que no necesitas una casa perfectamente limpia. Tus hijos solo son pequeños durante un corto tiempo y no vale la pena estresarse por tener una casa perfecta. Cambia tu mentalidad y diviértete con ellos mientras les enseñas a cuidar de sus cosas. Esto les ayuda a crecer como adultos responsables y bien adaptados.

Y no olvides que es casi imposible mantener tu casa perfectamente limpia… ¡porque vives en ella! La vida es desordenada, especialmente con niños, pero eso es parte de la diversión. Y cuando los niños ayudan pero no hacen un trabajo perfecto, recuerda que está hecho y no tuviste que hacerlo todo tú solo. A veces es divertido abrazar el desorden de la casa, dejar los platos sucios y amontonarse en la sala de estar para una noche de películas.

Por último, buscar la perfección puede llevarte a la procrastinación, porque nunca será perfecto, ¿por qué molestarse siquiera? Recuerda que tener una casa limpia es importante, pero una casa perfecta es imposible. Asegúrate de que esté lo suficientemente limpia y deja de lado el perfeccionismo. ¡Te sentirás mucho más motivado para limpiar si lo ves de esa manera!

¿Cómo está tu motivación para limpiar?

La próxima vez que te sientas desanimado/a acerca de la limpieza, echa un vistazo a estos consejos para motivarte a limpiar. Incluso puedes hacer una linda hoja imprimible con inspiración para la limpieza para ayudarte a ti y a los niños a inspirarse en esos días en los que no te sientes con ganas.

¿Cuál es tu mejor consejo para mantener la motivación para limpiar cuando no tienes ganas? ¡Deja un comentario y comparte tu opinión!